El otro día fuimos al Zócalo, en el centro de la ciudad de México, y nos picó por asomarnos a la Catedral: una construcción de enorme importancia social, histórica y visual. Ya adentro, observando la impactante arquitectura me dije "Hey, podría hacer una reseña de esto..." y esa es la historia :)
Un poco de historia: La catedral original mandó ser construída por el mismísimo Hernán Cortés en 1524 (a sólo 3 años de la conquista del centro de mesoamérica!! eso es seguridadde uno mismo.) Como muchas construcciones religiosas de la época, fueron levantadas simbólicamente sobre templos indígenas; en este caso particular, fue sobre el Templo Mayor. No fue sino hasta 1792 y 1813 que fue finalizada por el avalenciano Manuel Tolsá con los trabajos exteriores, además de agregar algunos detalles neoclásicos, cambio de cúpula, esculturas, etc.
Yo no soy a lo que se le podría llamar creyente, pero seas católico o no, vale la pena conocer tan importante edificio. La arquitectura, como debe serlo toda construcción del tipo, es impresionante, logrando un gran sentimiento al volver la cabeza al cielo y ver las enormes cúpulas, las paredes de oro puro, los extensos altares, el gigantesco órgano, el coro en remodelación que (actualmente) no te dejan ver, etc.
A la salida descubrimos que había tours por los campanarios al baratísimo precio de $12 pesos mexicanos. Me parece que son cada hora, siendo el último grupo a las 6:00 pm. Puedo decir que vale por completo la pena, y lo recomiendo ya en la tarde (si es posible, la última hora) pues ver el atardecer desde el techo es absolutamente invaluable.
Este barato tour te permite subir al techo de la catedral a través de una antigua y laaarga escalera de caracol. Podrás caminar por encima de las cúpulas, asomarte cuidadosamente a los vitrales y observar a la gente debajo (si creían que los veían desde el cielo, era cierto!! jujuju), tener una increíble vista del Zócalo (actualmente, invierno, está la pista de hielo, los toboganes y el árbol navideño gigante), entrar en los campanarios...y sobre todo tener una vista tan amplia y al aire libre que ningún mirador te puede ofrecer (en la torre latina te sientes encerrado, en vez de libre).
Una visita muy simple pero que te dará paisajes increíbles. Fácil de llegar porque todos saben dónde está el centro; y sino en metro, que tiene su estación en el mismísimo zócalo. Si tienen la oportunidad, se los recomiendo ;)
CRÉDITOS EXTRAS
La info histórica la saqué del boleto del tour que realmente es un folleto. Las fotos las saqué yo, si las usan nada más avisen en comentarios~
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