Bailando en la oscuridad

En uno de los maratones de película que realizo con mis amigas una de ellas trajo una de la que ni había oído hablar, pero resulto ser una obra brutal con más fuerza de la que hubiese esperado:

Dancing in the dark

Síntesis: Selma, una inmigrante checa y madre soltera que trabaja como obrera y se está quedando totalmente ciega a causa de una enfermedad hereditaria. Las circunstancias la llevarán al límite cuando el dinero que lleva ahorrando por años para la operación de su hijo es robado. Sin embargo ella encuentra escapatoria de la difícil realidad en los musicales, remontándolos con cualquier sonido que le provoquen la melodía pues: "En los musicales nunca pasa nada malo".

Antes dicho, esta película danesa es muy fuerte, extremadamente dramática y conmovedora en todos los sentidos. Aún con un ritmo algo lento en relación a la mayoría de los films, el guión y, por sobre todo la protagonista, transmiten un gran golpe emocional al espectador de inicio a fin.

La actuación de Björk como Selma es fenomenal, mostrándonos a una mujer ingenua, noble, trabajadora y soñadora que debe sufrir cada desdicha que se le depara, escapando constantemente de la realidad imaginando que vive en un musical donde "de pronto todos se detienen para bailar y cantar". Claro está que la música es excelente y se realiza un juego donde las escenas musicales, aunque mejoran el momento a Selma, están mal hechas a propósito de tratarse de una fantasía.

El final es extremadamente dramático y devastador. Aún sabiendo en la última parte cuál será la conclusión final, la sorpresa y explicitad de la última escena harán que todo el público se estremezca.

Terrible y hermosa, una película muy recomendable, pero se advierte que para los corazones sensibles esto los destrozará.